Uno de los problemas que acarrea el dinero en efectivo desde hace décadas es el de los billetes falsos. Recibir un ejemplar apócrifo es un verdadero dolor de cabeza. Sin embargo, si estamos atentos en el momento de manipular la moneda que sea, pesos, dólares, euros, reales, etc. tendremos más posibilidades de identificar aquellos papeles falsos y evitar tener uno no válido.
Todos los actores de la seguridad documental están siguiendo de forma constante la investigación y el desarrollo de nuevas medidas para proteger todo tipo de documentos, especialmente los billetes, que son de uso masivo. Tanto a nivel de elementos de seguridad particulares, sistemas de impresión, papel moneda, etc. hay grandes avances continuamente.
Asimismo, Estados y agentes financieros realizan enormes esfuerzos en procurar asegurar los documentos y evitar que circulen ejemplares apócrifos. No obstante, a pesar de los diseños de la ingeniería documental y la variedad y cantidad de elementos que poseen los billetes, existe en una parte de la sociedad un desconocimiento de este tema.
A veces, las personas no tienen la suficiente habilidad de identidad un documento falso. Uno de los principales motivos es la falta de conocimiento, íntimamente relacionado con la pobre capacitación y difusión de los responsables de los Bancos Centrales y emisores de moneda.
Y eso, los delincuentes lo saben. Además, los falsificadores también están en constante seguimiento de lo que sucede en materia de seguridad documental. Al fin y al cabo, es su trabajo.
En los últimos años, al mismo tiempo que avanzan las novedades de mayores y mejores medidas de seguridad, le siguen los pasos más falsificaciones y sobre todo difíciles de identificar, algunas muy similares a los documentos auténticos.
Tal es la calidad del trabajo de los falsificadores, que autoridades del Gobierno de Estados Unidos viajan a distintos países donde se realizan investigaciones seguidas de allanamiento y secuestro de dólares y se sorprenden por el producto al que llegan los delincuentes, como pasó recientemente en Córdoba, Argentina.
Pero, entonces, ¿qué se puede hacer? No estamos exentos de no recibir algún billete falso, pero al menos podemos reducir las posibilidades. Es importante conocer las medidas de prevención, los elementos de seguridad y desarrollar la habilidad de identificar los ejemplares falsos.
Una de las modalidades es seguir las distintas publicaciones de este sitio, especialmente las secciones de billetes y de seguridad. Así, podremos saber un poco más sobre las distintas monedas vigentes, pesos, dólares, euros, reales, etc. A través de las medidas de seguridad que se da a conocer de las diferentes divisas, es posible identificar aquellos billetes auténticos y discriminar los ejemplares apócrifos.
Reconocer billetes falsos. Si bien en los billetes de las distintas monedas pueden encontrarse papeles, formas, diseños y medidas diferentes -incluso se encuentran variaciones entre las denominaciones- existen normas generales. Una de ellas es el papel (llamado papel moneda), que es de muy alta calidad, producido con materia prima específica, con grandes diferencias respecto al de uso comercial, lo que es apreciable a través de los sentidos.
Luego, otros de los elementos que comparten varias divisas es la marca de agua, el hilo de seguridad, las fibrillas de seguridad, y los sistemas de impresión offset y calcografía.